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VIAJES
También destacan de la catedral su Re-
tablo Mayor, de estilo renacentista obra
de Damián Forment, y su Torre Exenta
barroca, una de las más altas de Espa-
ña, más de 70 m de altura, además de
algunas bellísimas capillas como la del
Sepulcro de Santo Domingo, la de la
Magdalena, la del Santo Cristo, las de
Santa Teresa y San Pedro y por supues-
to la del Santo Cristo de los Peregrinos.
Catorce son las capillas laterales de esta
magnífica catedral. Pero si hay una es-
tancia que sorprende al viajero esta es
su cripta, recubierta desde 2019 por los
mosaicos ilustrados del artista esloveno
Marco Rupnik que relatan la vida del san-
to además de incorporar escenas típicas
de la iconografía religiosa convencional
desde el sentir artístico de su autor.
Las calles empedradas, los soportales
y las casas nobles de la villa conservan
ese aire de tránsito y hospitalidad. Cada
rincón parece hecho para recibir al via-
jero, como si los siglos no hubieran al-
terado la esencia de aquel gesto inicial:
tender la mano al caminante.
Ayto. de Santo Domingo de la Calzada
Vista de la Catedral y su Torre Exenta barroca
Santo Domingo de la Calzada
El camino y el milagro
Todo comienza —como tantas veces en la his-
toria riojana— con el Camino de Santiago. San-
to Domingo de la Calzada nació al calor de esa
ruta milenaria y lleva en su nombre la huella de
un hombre santo y obstinado. Domingo García,
un humilde pastor del siglo XI, decidió dedicar
su vida a facilitar el paso de los peregrinos que
cruzaban estas tierras: construyó puentes, alla-
nó caminos, levantó un hospital y, sobre todo,
fundó una villa que se convertiría en refugio es-
piritual y humano para miles de caminantes.
La ciudad conserva intacto ese espíritu. Su cate-
dral, iglesia-fortaleza del siglo XII, levantada so-
bre la tumba del santo, es una joya del románico
tardío y el gótico inicial, donde la fe se mezcla
con la leyenda. En su interior, junto al sepulcro
de Santo Domingo, sorprende un gallinero de
piedra y madera donde viven un gallo y una ga-
llina blancos: recuerdo del célebre milagro del
peregrino ahorcado, en el que las aves resuci-
taron para demostrar la inocencia de un joven
injustamente condenado. Desde entonces, el
refrán “Santo Domingo de la Calzada, donde
cantó la gallina después de asada” forma parte
del imaginario popular riojano.
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