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El viaje interior
Al final del camino, Madagascar deja
una huella que no se borra. No es un
destino que se conquiste ni que se
entienda del todo. Es un lugar que
se acepta. Enseña a mirar despacio,
a escuchar, a reconocer la vida en lo
simple.
Sus caminos de tierra roja, sus sel-
vas envueltas en niebla y sus árboles
invertidos no son solo paisajes: son
metáforas. En ellos se adivina una
lección antigua sobre la paciencia, el
silencio y el respeto.
Cuando el sol se apaga en la Avenida
de los Baobabs y los niños corren en-
tre los troncos gigantes riendo contra
el viento, uno comprende que la vida,
aquí, sigue otro ritmo.
Madagascar no se visita, se
atraviesa. Y quien la atraviesa,
ya no vuelve igual siempre que-
da tocado por la isla.
VIAJES DE AUTOR
Apuntes para el viaje
Cómo llegar
Salida desde Madrid o Barcelona hacia la capital malgache,
Antananarivo (Tana). Normalmente con una escala en París,
Kuala Lumpur o Johannesburgo. Llegada al aeropuerto Ivato
(cerca de la ciudad) para instalarse las primeras noches. Es re-
comendable reservar el vuelo con antelación y prever traslados
desde el aeropuerto al hotel (taxi oficial o traslado concertado).
Dónde dormir
Hotel Carlton Madagascar (Antananarivo)
Un clásico de la ciudad – situado en Anosy, con habitaciones
cómodas, vistas al lago Anosy y al palacio real. Ideal para ins-
talarse al inicio del viaje.
Radisson Blu Antananarivo Waterfront
(Antananarivo)
Hotel moderno, buena ubicación junto al agua, restaurante en
la azotea con vistas. Perfecto para una estancia de confort des-
pués del vuelo antes de partir hacia el interior.
Si quieres algo más íntimo y conectado al paisaje (y estás despla-
zándote al sur o al oeste) podrías considerar un lodge en la zona
de los baobabs o la sabana malgache (aunque requerirá traslado).
Dónde comer
Para que tu viaje tenga sabor local, gastronómico y algunas
experiencias de diseño contemporáneo, aquí van cuatro reco-
mendaciones en Antananarivo.
La Varangue: Restaurante de estilo europeo-malgache con-
siderado entre los mejores de la ciudad. Ideal para una cena
elegante de apertura.
Marais Restaurant: Alta cocina en Madagascar con produc-
tos locales reinterpretados. Buena para un reportaje de autor
que quiera hablar de diseño, espacio y gastronomía.
Cafe Du Musee: Un poco más informal, buen ambiente, y
bien ubicado para una comida relajada tras recorrer la ciudad.
Restaurant Sakamanga: Para una experiencia más autén-
tica, con ambiente local, donde probar platos tradicionales malga-
ches (como ravitoto o trondro maina) y sentir el pulso de la ciudad.
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